Indicaciones del vástago cementado en la cirugía de revisión de prótesis total de cadera
A. LIZAUR UTRILLA
RESUMEN
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La causa más frecuente del fracaso de la prótesis total
de cadera en cirugía primaria es el aflojamiento aséptico del vástago,
tanto en los cementados como en los no cementados, aunque
por causas diferentes: En los cementados la causa primera
es mecánica, por debilitamiento del manto de cemento, y en los
no cementados es biológica, por formación de tejido fibroso y no
de hueso intrapórico. En los cementados el aflojamiento suele
iniciarse tardíamente, pero una vez presente progresa rápidamente;
mientras que en los vástagos no cementados la aparición
de radiolucencias suele ser más precoz, pero de progresión
lenta. Tras cirugía de revisión del vástago la complicación más
frecuente sigue siendo el aflojamiento aséptico en ambos tipos
de vástagos. Las ventajas de utilizar en cirugía de revisión un
vástago cementado son que pueden asociarse antibióticos, que
el cemento obstruye el paso de partículas de polietileno a la
metáfisis femoral y que es posible una buena adherencia aún con
mala calidad ósea; el inconveniente es la mayor dificultad de la
extracción en caso de fracaso. Las ventajas de utilizar para revisión
un vástago no cementado son que es posible el crecimiento
óseo sobre un lecho refrescado o cubierto de injertos y que la
extracción en caso de fracaso es menos dificultosa; pero el
inconveniente es que para propiciar el crecimiento óseo intrapórico
es preciso el íntimo contacto entre lecho, o injerto, e implante,
lo que no siempre es posible en los casos de revisión o de
mala calidad ósea. En la literatura, los resultados en cirugía de
revisión con uno u otro vástago son francamente contradictorios,
pero todos parecen coincidir en que la elección del vástago
depende de varios factores, como la esperanza de vida, demanda
de actividad, obesidad, calidad de hueso, cantidad de hueso
remanente en el fémur proximal y geometría del mismo. El principal
factor es la calidad ósea: Ante buena calidad, los resultados
suelen ser favorables, indistintamente del tipo de vástago utilizado;
pero ante mala calidad ósea los resultados suelen ser peores
con vástagos no cementados.